ABEL...
Caín
Hermano
de vientos, nubes, diluvios y ríos
Un
mar de luces opalinas gravita en los guáimaros de la ciénaga
Y
se aglutina en mi espejo
Como
un prisma que nos dice:
La
muerte es una puerta
Y
el tiempo una ventana
Por
donde nuestros pasos presurosos
Perciben
otras cosas, otros mundos.
Bello
Caín
La
quijada de burro con la cual me mataste
Tenía
el olor de las encinas y los pinos,
De
tus labios venía hasta mi norte
Unos
chopos amarillos
Que
enhilaban mis pétalos melancólicos
En
el hilo de la muerte.
Hermano
profanado por los cielos
El
dolor de tu hacha cavernoso
Penetraba
mi topografía más remota
Mi
geografía y mi valle más sagrado.
Ante
el golpe subceleste
Que
yo he encontrado sutil y generoso
Y
que tú asestaste con una sabiduría infinita
Yazgo
en la orilla de tu río, pensativo.
Oh,
amado Caín
Tus
huellas de madreselva
Van
decorando mis entrañas,
Van
vistiendo de semillas, de hiedras y resinas olorosas
Mi
cuerpo fatigado por los viajes.
Mi
sudor se impregnaba de tus frutas;
Tus
piñas, toronjas y zapotes
Decoraban
mi cabeza
Con
coronas tejidas por cientos de cuchillos.
Nada
soy sin tu golpe
Herrero
milenario;
Tus
manos son el yunque
Que
moldean, a la sombra de estas islas misteriosas,
La
herradura, los cristales y los cuarzos
De
otras Islas en el hado de la muerte.
Caín
Hermano
de mis antepasados
Hay
en ti un pretexto para silenciar la historia
Como
si la memoria de las dagas
No
aceptaran la muerte de Goliat
Como una templanza de David,
Mi
muerte es una templanza tuya.
Amado
Caín
Por
tu golpe y tu palabra
He
conocido el paraíso.
http://eldigoras.com/eom/2002/aire14wms01.htm
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